Desde que acabé la carrera de arquitectura en la ETSA Barcelona resido en Valencia, donde trabajo desde hace 3 años en enne estudio, enfocado en el desarrollo de las memorias y tramitación de nuestros proyectos.
Pero hay otra faceta de mí no tan común en un arquitecto, y es que durante mis estudios vi que no solo podía dedicarme a la construcción, ya que comenzaba a ver conexiones que quería sacar a la luz entre la arquitectura, el cine y los videojuegos. Así nació mi blog ‘Arch & Media’, donde empecé a analizar esas expresiones artísticas bajo el punto de vista de la arquitectura, y que ahora he mudado a mi propia web.
Escribí para revistas digitales de videojuegos como Equilateral y Presura, y gracias a mi colaboración con el blog del Festival Internacional de Cine y Arquitectura analicé muchas películas y series, pero con el tiempo me he ido centrado solo en los videojuegos y los intento defender como un medio cultural, puesto que hoy en día aún están infravalorados, a pesar de haber revistas y personas especializadas en ello.
Y es que hace muchos años que hay arquitectura en los videojuegos, solo basta con pensar en la importancia de los escenarios de La abadía del crimen (1987) y echar un vistazo a la reciente demo técnica de The Matrix Awakens; entre esos dos extremos hay un sinfín de ejemplos y de formas de representarla, sin olvidarnos de las ciudades que en muchos casos nos hacen explorar y que necesitan de su propio urbanismo.
Todo este interés no es solo por dejar constancia de aquello que me gusta disfrutar en mi tiempo libre, sino que es vocacional. En el año que colaboré en el blog del Festival Internacional de Cine y Arquitectura seguí aprendiendo de todos estos temas que me apasionan y empecé a pensar que no tenía por qué construir solo en la realidad, sino que los arquitectos podemos aportar nuestra visión y conocimientos al equipo creativo de esos mundos que visitamos al otro lado de la pantalla.
Con las herramientas que me brinda enne estudio, así como con el apoyo de mis compañeros, que me motivan a seguir mi camino, quiero encontrar mi propia voz en la arquitectura, y demostrarme a mí mismo que hay algo más allá de la normativa y la rigidez de nuestro mundo laboral.