De Pokémon, naturaleza y ‘tsugite’ 🧵

¿Puede ‘Pokémon Leyendas Arceus’ ser un viaje de descubrimiento de algunos puntos de la arquitectura japonesa y de su relación con occidente?

Lo que más me sedujo de los escenarios al inicio del juego y lo que captó mi atención es la importancia de la naturaleza. Una muestra son sus paisajes, que casi siempre tienen el Monte Corona de fondo.

Esta montaña, que tiene una presencia constante en todos los escenarios, es un reflejo de la importancia del Monte Fuji en la obra de Hokusai: funciona como un hito natural que destaca y que nos permite orientarnos en nuestra aventura.

Además de reforzar la presencia e importancia de la naturaleza en el arte y la cultura niponas. Otro ejemplo de esto son las construcciones tradicionales que podemos ver en el juego, a base de estructuras de madera ensambladas.

Y es que los japoneses desarrollaron el «Tsugite» (継ぎ手), una técnica para realizar juntas de madera sin utilizar elementos de anclaje ni encolados, haciendo que las estructuras se sustenten por la simple forma y unión de sus piezas.

Y lo curioso es que era un sistema constructivo que se empleaba tanto para templos como para las viviendas, unificando mediante la madera lo divino y lo mundano. Las casas de Pokémon Leyendas son también ejemplo de ello, y toda una delicia.

Lo que destaca también en Hisui es la importancia de la influencia y las relaciones entre Japón y occidente, ya que por el camino encontraremos también ruinas de clara inspiración griega.

Así como el eclecticismo de la sede Galaxia y de Villa Jubileo en general, donde confluyen la arquitectura europea y la nipona.

Por todo esto y por lo jugable, ha sido un viaje que me ha encantado, y una de las mejores experiencias Pokémon. Se nota mucho esfuerzo por reinventar la fórmula y se agradecen todas las diferencias respecto a la saga principal.

Ojalá estos nuevos caminos sigan desarrollándose, y, sobretodo, que siga habiendo momentos tan difíciles como los del combate final del «post-game», esas ruinas ya me han visto fracasar unas cuantas veces.

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Germán Valle
A pesar de que soy arquitecto desde 2015 y estoy empeñado en ayudar a construir, creo que más allá de la rigidez de nuestro mundo laboral hay lugar para los arquitectos al otro lado de la pantalla, donde podemos aportar nuestra visión y conocimientos al equipo creativo de los mundos que visitamos en la ficción.

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